martes, 25 de abril de 2017

ORACIÓN DEL TORERO


 
 
ORACIÓN DEL TORERO
 

Ante tus plantas me poso,


Reina y Señora mía.

Y en la Capilla del Coso

rodeado de mis miedos

con la lengua enlabazada

me aventuro a balbucear

Tu nombre pidiéndote a coro

que en la batalla a librar

me cubras con ese manto

cual nube me llegue a tapar,

librándome de algún pitonazo

y logre volver a triunfar.

 

Con todo el poder que Tú tienes,

haz que me embista el morlaco,

que acuda presto a su cita

que sea noble en la embestida

y no desarrolle resabio.

Que mi llamada sea, como un resorte

que encienda la mecha de su bravura

y haciendo gala de su hermosura

logremos juntos buscar el Norte.

 

¡Escúchame, Fuensanta mía!

En tus manos dejo mi protección,

sabiendo que siempre serás mi guía

luz que ilumine en la noche oscura

faro que alumbre en la mar bravía

sombra que impida la insolación,


de este indigno e insignificante siervo

que deja sus miedos bajo tu manto

y pide a gritos con devoción,

¡Ayúdame a pasar este trance, Virgen de la Consolación!

 

 
                       
        Esta oración está grabada en un mosaico, en la capilla de
          la  Plaza de Toros de la ciudad de Murcia (España)





lunes, 10 de abril de 2017

SEMANA SANTA DE PASIÓN


 
 
SEMANA SANTA DE PASIÓN


 
Míralo por donde viene
con su carita de pena,
todo su cuerpo le duele
cuando una saeta suena.


Con setenta nazarenos
y una estela de cofrades
van rogando ser más buenos,
purgando todos sus males.


Juan, Pedro, Verónica
romanos de casco y peto
componen escena armónica,
actores, que en un aprieto
hicieron de Dios, figura agónica.


El cortejo se dirige
entre calles y plazuelas
plegarias de mil abuelas
a quien Rey, por fin se erige.
 

Costaleros que lleváis
sobre los hombros la muerte
no cejéis en ser más fuertes
y empujad cuanto podáis.
Al compás de madrugada
hombro a hombro la bailáis
a una Virgen destrozada
a sus pies todos lloráis.

 
Cuando al son de los tambores
las trompetas se desgarran
abren paso dos faroles
multitudes que se afanan,
en ver como el Cristo se mece
bailando en un mar de lagrimas
cuando el cielo se oscurece
y ocultándose parece
esconder nuestras hazañas.

 
Canta una voz desgarrada
a ese Cristo de Pasión,
que con sangre derramada
suplico nuestro perdón,
y en la cruz una mirada
implorando compasión.

 
Nace al alba un nuevo día
y en el silencio resuenan
cadenas de quien porfía
penitencias que exoneran.

 
Cuando al filo de la tarde
llega el cortejo a la cima
después de caer tres veces
y en el rostro se lastima,
una Verónica en su afán
de enjugar su pena atina
paños que siempre darán
imagen de quien sublima.

 
Cual si fuera un malhechor
rodeado de bandidos
sufre el Cristo del helor
que desgarra sus sentidos,
y antes que venga la muerte
tratando de hacerse el fuerte
clama al Cielo por su suerte,
y con voz potente y clara
entonando una plegaria
compasivo se abandona
y expirando, nos perdona.





martes, 4 de abril de 2017

ABRIL


 
 
ABRIL
 
 

El sonar de los tambores

una saeta desgarradora,

el que sufre los horrores,

muchedumbre pecadora.



Deja que nazca la luz

que florezcan los almendros,

que venga el viento del sur

y cambie el rumbo del tiempo.



Caballo que das el paso

de una guitarra el compás,

tráenos aires de esperanza

de lograr que en la bonanza
 
podamos cruzar el mar.